El anillo de Sakuntala
Tercer acto
Sakuntala cae en un estado a medio camino entre la vigilia y el sueño. Dusyanta observa primero a su amante desde un escondrijo. Cuando se acerca, Sakuntala siente como si su amante llegase a ella directamente a través de un sueño. Se unen y contraen matrimonio en secreto. Dusyanta tiene que regresar a la corte real durante algún tiempo y le promete a Sakuntala que volverá pronto para llevarla a su corte real como consorte. Exultante, Sakuntala baila de alegría.
Ilustraciones
Jiahuan Wang
La paz ha vuelto a la arboleda sagrada.
Tras repeler el ataque de los demonios, Sakuntala cae en un estado entre la vigilia y el sueño.
Dusyanta observa a su amada desde un lugar oculto.
Sueño y realidad se entrelazan para Sakuntala.
Juntas, Sakuntala y Dusyanta olvidan el tiempo y el lugar.
Dusyanta y Sakuntala recuerdan su primer encuentro. Por aquel entonces, Dusyanta había prometido no olvidar nunca a Sakuntala. Como muestra de su amor, le había regalado un anillo.
Dusyanta y Sakuntala deciden casarse sin esperar a que regrese el padre de Sakuntala.
Como rey, Dusyanta se ve obligado a viajar a la capital. Promete a Sakuntala que volverá pronto.
A pesar de la marcha de Dusyanta, Sakuntala está llena de confianza. Baila con exuberancia.
Comienza un largo periodo de espera para Sakuntala.